viernes, 25 de octubre de 2013

Cuidarse para cuidar a los demás

Hace unos días viaje en avión y cuando dieron las instrucciones de seguridad me quedé pensando en la mascarilla de oxígeno; ponerse uno primero la mascarilla antes que a nuestro hijo; a primeras suena raro, pero la verdad es que es muy obvio y razonable, cómo podemos ayudar a alguien si no estamos respirando? Que buena moraleja para aplicarla en el día a día.

Eso me recordó cuando mi madre me dijo que yo no me postergaba por mi hija, y por supuesto que mi hija es una de las "cosas" más importantes y preciadas en mi vida, pero si yo no estoy bien difícilmente  puedo transmitirle felicidad y tranquilidad a ella. Uno es madre, esposa, trabajadora, amiga, hermana, etc., pero también tiene que ser uno mismo y darse el tiempo para cuidarse, hay que hacerlo sin culpa y pensando que la única forma que todo funcione es que haya un equilibrio y para eso uno debe estar plena. Nadie puede querer si primero no se quiere a si mismo.

Yo por mi parte, necesito unas horas de deporte al aire libre y una velada con una amiga a la semana; con eso boto mi estrés y quedo despejada para cumplir mis otros roles.

Y tú qué haces para ti misma?

miércoles, 2 de octubre de 2013

Problemas para ir al baño


Hace poco más de un mes, mi hija de 3 años tuvo problemas para ir al baño y después de eso.... terror al baño. La pobre sufrió tanto que ahora se aguanta días para no ir y va solo cuando ya no aguanta más, pobre!!!

Lo primero que hice, cuando comenzó a tener problemas, fue cambiar nuestros hábitos en casa y reemplace la once por cena; este cambio será saludable para todos, ahora al llegar a casa comemos ensalada con pescado, carne o pollo o una sopa de verduras. Otro cambio que hice fue concientizar a mi hija que los dulces, bebida y chocolate de la leche son responsables de su problema; no es que tome bebida o coma dulces todos los días, pero cuando va a casa de mis padres, consume mucho, por todo lo que no consumió en la semana. Como sufrió tanto con el baño, no le costó interiorizar esto; ahora toma leche blanca y cuando pide dulces o bebida donde sus tatas entiende que no puede consumir más de uno.

Todos estos cambios ayudaron a que su digestión mejorara, pero no sé cómo quitarle el miedo al baño. Pensé que al darse cuenta que ya no le dolía, el miedo se iba a ir, pero no se ha ido. La acompaño al baño, intento darle seguridad, pero no hay caso, se aguanta días y días y llora cuando le dan ganas de ir.

Qué me pueden aconsejar? Cuál ha sido su experiencia?

jueves, 26 de septiembre de 2013

Te crees payaso???

Mi hija ayer me dijo Te crees payaso? En un tono como llamándome la atención, y la verdad no me gustó para nada. Le pregunté dónde había escuchado esto,  me respondió que la Tía del jardín lo decía.

Cuando me preguntó esto, yo le respondí que sí, me creía payaso; porque los payasos hacen reír y a mí me gusta hacer reír a la gente, le dije que era bueno ser payaso y dar alegría. Para que lo comprendiera mejor, jugamos a los payasos, le conté chistes, le hice bromas y bailamos; pasamos una muy buena tarde.

Creo que es inevitable que las educadoras traspasen sus errores a los pequeños, ya que ellas no están conscientes de que son errores. Me acordé cuando mi mamá me contó que su papá siempre le decía "En la cara de los tontos abunda la risa" y eso repercutió obviamente en ella, en su manera de ser. Las educadoras no deberían referirse así, no deberían utilizar esas palabras para corregir un "mal comportamiento".

Espero poder transmitirle a mi hija que reír y hacer reír es bueno para el alma, al igual que jugar y divertirse, que esto no debe perderlo con los años. Por sobre todo, espero poder corregir aquellas cosas erradas que pueda ver y/o escuchar mientras vive y descubre el mundo.

viernes, 17 de mayo de 2013


Su propia cama




¿Qué es mejor, que tenga su propia cama y pieza o que duerma con los padres? Hay diferentes tendencias, todas tienen sus pro y sus contras, como todo en la vida.   Yo a ratos soy partidaria de una y a ratos de la otra; pero en mi vida diaria practico una mezcla.

Por un lado creo que es importante que el niño duerma en su propia cuna o cama, primero por motivos de seguridad, para no aplastar al bebé al dormir; segundo para mantener la intimidad de la pareja, aunque esto no es tan cierto en la práctica, ya que si uno quiere momentos de intimidad puede hacerse espacios como la cama del hijo, el living, etc., hay que usar la imaginación.  Pero por otro lado, que rico es disfrutar a nuestros retoños abrazaditos en la noche, sentir su aroma y que ellos nos sientan cerca.

Personalmente desde que mi hija llegó a nuestro hogar ha tenido su pieza aparte y ha dormido en ella, pero sólo la mitad de la noche, porque  a media noche la pasamos para nuestra cama y disfrutamos dormir con ella, aunque, cuando se apodera de la cama y duerme cruzada sea un poco incómodo.

miércoles, 15 de mayo de 2013


Diferentes formas de ver el mundo


El otro día mi hija estaba jugando con plastilina, y me dijo –voy hacer un perrito; una vez que terminó me lo mostró; que lindo quedó le dije, pero le falta la cola. Hice una cola de color y se la puse a su perrito, pero Sofía reclamó – ¡mamá, la cola va atrás, no en la cabeza!- ella tomó la cola y la cambio de lugar. La verdad es que yo, según mi perspectiva, había puesto la cola atrás, pero obviamente mi hija había imaginado y hecho un perro distinto al que yo podía ver.

No sólo los niños ven las cosas diferentes, sino que cada uno de nosotros. Los diferentes modos de ver las cosas enriquecen los ambientes, crean nuevas soluciones, nuevas obras de arte, nuevos inventos. Es importante que en el lugar donde nuestros hijos se eduquen los dejen expresarse y no los limiten a una sola realidad.

lunes, 13 de mayo de 2013

El mejor colegio


Cuando iba al colegio y discutíamos sobre el futuro de la sala de clases, pensábamos que en el futuro no existirían colegios físicos y que la educación sería desde la casa, esta posibilidad me alarmaba; pensaba en niños burbujas, en que toda su vida ocurriría en su casa privándolos de compartir con sus pares, niños sin socialización; y meditaba sobre la grave consecuencia que esto acarrearía.

Hoy soy madre de una niña de 3 años, y pienso distinto; pero no porque esté en contra de los colegios físicos, sino que la educación que se imparte, más bien dicho, la forma en que se imparte la educación en la mayoría de esos colegios es la que no me deja conforme. No me gustaría que mi hija se eduque en un sistema en que el ser distinto sea una desventaja, ya que pienso que es una ventaja incluso para su entorno. No quiero que le enseñen a memorizar, sino que a razonar, que no hay solo una respuesta correcta; quiero que respeten sus tiempos; que potencien su diferencia.

La educación en casa no es para todos, no sólo porque económicamente es más cara, sino que no todos somos iguales, hijos y padres. Creo que para una educación en casa como padres hay que estar muy comprometidos, ser muy perseverantes, conocer bien nuestros límites, debilidades y fortalezas, y tener un empleo compatible.

Mi hija está creciendo y debo buscar “colegio” para ella y esto ha sido un dolor de cabeza, pero a su vez un enriquecimiento y crecimiento personal. No creo que como familia estemos preparados para educar a nuestra hija en casa por el momento, ya que ambos trabajamos jornada completa, por lo que estoy en la búsqueda de un colegio que se acerque a la educación integral que queremos para nuestra hija, cosa difícil en el sector sur de la capital.

jueves, 9 de mayo de 2013

El comienzo...



Todo empezó cuando mi hija comenzó a crecer y entró al jardín infantil, como al año de edad. El jardín fue una odisea, le costó integrarse, no fue por desapego a mí, porque yo volví al trabajo cuando ella tenía apenas 3 meses. Su educación comenzó de a poco a tomar mayor relevancia, sentía que en el jardín aprendía a socializar, pero con dificultad, y que aprendía lentamente en otros temas en comparación a cómo aprendía lo que les enseñábamos en casa; tal vez por eso siempre han dicho que la educación más importante es la que les brindamos en el hogar.

 Mi hija estaba a punto de cumplir los 3 años cuando por casualidad (aunque no creo que las casualidades existan) le diagnosticaron Trastorno de Integración Sensorial (TIS), hay todo comenzó a cuadrar, por qué le asustan los ruidos fuertes, no le gustan las etiquetas de la ropa ni siquiera para probársela, le asustan los tumultos de gente, entre otras cosas.


Como mamá uno tiene un instinto con el comportamiento de los hijos, por ejemplo, cuando la invitan a un cumpleaños nosotros siempre llegamos de los primeros, así ella va paulatinamente incorporando gente a su alrededor y esto desaparece su incomodidad y puede integrarse y disfrutar plenamente el cumpleaños.  Esta decisión fue sólo instintiva, pero es mucho mejor cuando uno sabe la razón por la cual uno debe manejar una situación de determinada manera, es más sencillo ver las opciones que se tienen y obviamente esto repercute positivamente en nuestra hija.

Tomé la decisión de comenzar este blogg para poder compartir mi experiencia con otros padres y también para enriquecerme con las experiencias de otros, creando una red de apoyo al leer cómo otros han superado sus dificultades en este difícil camino de educar a nuestros hijos.